MODELO CLÍNICO DE LA ATENCIÓN

La atención es considerada uno de los dispositivos básicos del aprendizaje, es decir que, como tal, es condición necesaria para propiciar este proceso que va a dar lugar a modificaciones a nivel cerebral, ya que todo aprendizaje conlleva una modificación en las redes neuronales.

Consiste en un proceso conductual y cognitivo de focalización consciente en un estímulo, inhibiendo todo aquello que resulte irrelevante al fin que se persigue.

En lo que respecta a la Neurociencia, se han propuesto diferentes modelos de la atención, observándola desde diferentes perspectivas. En este artículo, hemos de centrarnos en el modelo clínico.

El modelo clínico

El modelo clínico de la atención, fue desarrollado por Mckey Moore Sohlberg y Catherine. A. Mateer (1987 -1989), apoyándose en datos obtenidos de la Neuropsciología Experimental  y si bien está orientado al desarrollo de programas de tratamientos, su aplicación se extiende a todos los campos de la vida diaria, resultando muy útil para el ámbito de la educación.

Sostiene que la atención es un proceso complejo que, a su vez, incluye distintos subprocesos o tipos de atención. . Se trata de un modelo jerárquico, en el que cada nivel inferior sustenta al superior. Así, se presentan diferentes niveles de atención:


Comenzando por el más elemental, hasta el superior, estos seis niveles de atención son:

👉 AROUSAL: se trata de la atención que permite el estado general de activación del organismo, la capacidad de alerta y el seguimiento de estímulos y órdenes. Es el nivel de activación cortical del organismo, que nos conecta con lo que sucede. Es imprescindible lograr un cierto nivel de arousal (activación) mediante los estímulos ambientales para emprender cualquier tarea a realizar. Este nivel atencional posee un vínculo íntimo con las emociones, ya que estados emocionales intensos pueden provocar cambios bruscos en el arousal.

Elevados niveles de arousal no son recomendables, dado que pueden generar ansiedad o nerviosismo, ya que el rendimiento disminuye por procesos de estrés o sobreestimulación.



👉 F

OCALIZADA: es la habilidad para dirigir la atención de modo específico hacia un estímulo (táctil, visual, auditivo, etc.). Esta clase de atención se relaciona con diversos factores:

Personales: no sólo varían de una persona a otra, sino también de acuerdo al estado en que se encuentra la propia persona en un determinado momento: el estado que presenta en cuanto a la activación, la motivación, el interés, sus mociones... Estar de buen humor, despiertos, motivados, seguramente facilitará la detección de los estímulos. No así, si por el contario si  la persona se encuentra adormecida, triste o enfadada.

Contextuales un entorno en el que, principalmente no se perciban amenazas que requieran el incremento del estado de alerta (arousal), pero que además sea equilibradamente estimulante, es decir que los estímulos sean adecuados, pertinentes y no excesivos, lo cual produciría una sobreestimulación negativa.

Inherentes al estímulo como su complejidad, la posibilidad de acceso, la curiosidad que despierta, la manera en que se presenta, su significatividad.

 


👉 SOSTENIDA: consiste en mantener una respuesta atencional continua, por un tiempo prolongado. Dentro de este nivel, se distingue:

Vigilancia permite detectar la aparición del estímulo y la concentración por la cual podemos fijarnos en él.

Control mental o memoria operativa en tareas que implican el mantenimiento y la manipulación de información de manera activa en la mente.

 



👉 SELECTIVA capacidad para elegir de entre varias posibilidades, la información relevante que se ha de procesar, o el esquema de acción adecuado, inhibiendo la atención a los estímulos no significativos. Aquí se diferencia:

Atención voluntaria Demanda esfuerzo.

Atención involuntaria  El estímulo capta la atención.

 



👉 ALTERNANTE es la facultad que permite cambiar el foco de atención entre tareas que suponen demandas cognitivas diferentes, de manera fluida. A su vez, controla qué información es procesada en cada momento.




👉 DIVIDIDA se refiere a la capacidad de atender dos cosas al mismo tiempo, es decir, realizar más de un proceso o esquema de acción de modo simultáneo. Puede requerir el cambio veloz entre tareas, o la ejecución automática de una de ellas. 




Neurotips para entrenar la atención

Todos los niveles de atención se pueden entrenar y, gracias a ello, optimizar. Si eres educador, además de implementar juegos y actividades específicas para ello en tus clases, puedes;

💠 Cuidar la distribución temporal de la clase. Se sabe que tiene mayor impacto lo que sucede al inicio para captar la atención, despertar el interés y la curiosidad. Hacia la mitad de la clase, es un momento apropiado para el aprendizaje cooperativo, mientras que el final es apto para la implementación de estrategias metacognitivas.

💠 Ayudar a tus estudiantes a reconocer y destacar la información relevante en sus materiales de estudio.

💠 Cuidar la presentación de los materiales; color, tamaño, organización de la información, selección de imágenes y textos estimulantes.

💠 Utilizar elementos sorpresa, que salgan de lo habitual en la clase: una situación o planteo que genere debate; relaciones entre intereses cotidianos de los estudiantes con el contenido a enseñar, 

💠 Emplear estrategias sensoriales para atraer la atención sobre aquello que lo requiere: canciones, frases a modo de juegos, algún ritmo marcado con palmas.

💠 Anticipar las tareas a desarrollar mediante la agenda de la clase, de modo que los estudiantes puedan predisponerse mentalmente a la tarea.

💠 Adoptar estrategias lúdicas, por ejemplo, el juego del eco: repetir lo último que ha dicho el profesor cuando dice "eco".

💠 Realizar cambios en el tono y ritmo de voz.

💠 Hacer pausas o recreos cerebrales.

💠 El humor es un excelente recurso de alto impacto, tanto para la atención como para la memoria.

💠 Elegir metodologías activas: rutinas y destrezas de pensamiento,  gamificación, aprendizaje basado en proyectos.

💠 Cuidar las condiciones ambientales: que los estudiantes se sientan a gusto, que no haya interrupciones, ni exceso de estímulos (distractores)

💠 Interaccionar positivamente con los estudiantes: contacto visual, llamarlos por su nombre, escuchar sus planteos, sus miedos y sus dudas, darles protagonismo, involucrarlos con los objetivos de aprendizaje.

💠 Considerar los intereses de los estudiantes e integrarlos al desarrollo de las rutinas y temas propios de la educación escolar.

💠 Inspirar con la propia actitud ante el conocimiento. El docente -literalmente- contagia el amor por lo que enseña. Asegúrate de estar compenetrado con aquello que has de enseñar. La fuerza del ejemplo es poderosa.


 María José Sánchez - Neuropedagoga


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