Neurodigma

La importancia de encontrar un sentido a la existencia para vivir más y mejor. Según los japoneses, todas las personas tienen su ikigai . Hay quienes ya lo han encontrado, por lo tanto son conscientes de él, mientras que muchos continúan en su búsqueda, aún cuando lo llevan dentro. Así es, el ikigai está guardado muy dentro nuestro y requiere una exploración profunda,  paciente y sincera para acceder a él. El ikigai es nada más y nada menos que  "la razón por la que nos levantamos cada mañana" , aquello que nos motiva desde lo más profundo de nuestro ser y nos brinda el regocijo de realizarlo.  El ikigai se transforma según pasa la vida: la "razón de ser" no es la misma en la adolescencia que durante el transcurso de las diferentes fases de la adultez. Y resulta fundamental sintonizar con él en cada etapa vital, dado que se halla en el centro del ser. Las emociones y sentimientos serán la brújula que permitirán darse cuenta si hay un alejamiento de la senda del ikig

¿Quién no se ha cruzado alguna vez con un envidioso?¿Quién no ha sentido envidia alguna vez? Pues, cualquiera de las opciones ha de servirnos para reflexionar acerca de este sentimiento. ¿Qué hay detrás de la máscara de la envidia? Por tratarse de un sentimiento es el agregado de una emoción básica (tristeza, ira) que es espontánea e inevitable y un pensamiento que surge de la comparación con otros.  Las personas que sienten envidia -temporal o permanente-, en realidad esconden un trasfondo de enojo, dolor, inseguridad, tristeza, desvalorización al creer que no pueden lograr lo que otras personas han alcanzado. Suelen pensar que aquello que otros tienen o han logrado, sería la razón de su felicidad pero no se sienten aptos para obtenerlo. Una persona que experimenta envidia hacia otros, está poniendo en evidencia una autoestima dañada y empobrecida. Se envidian los logros, el éxito, la popularidad, el dinero, las relaciones... Napoleón Bonaparte, lo expresó muy bien al indicar que &quo

La culpa es un sentimiento -consciente o inconsciente- que genera disconformidad, inseguridad y malestar con nosotros mismos, debido a una disonancia entre las creencias que nos están limitando y los pensamientos potenciadores que queremos desarrollar. Se reconocen diferentes variedades del sentimiento de culpa: 👉 CULPA REFLEXIVA : se vale de las capacidades cognitivas e introspectivas de la persona. El análisis o reflexión se realiza en base al filtro de sus creencias. Muchas creencias limitantes llevan a la culpa. 👉 CULPA IRRACIONAL : la persona cree haber ocasionado daño a otros o haber generado resultados indeseados, sintiéndose invadida y paralizada por un sentimiento profundo, automático, masivamente paralizante y altamente resistente a los fundamentos racionales. Generalmente, se siente perseguida por un remordimiento destructivo. 👉 CULPA PATOLÓGICA : relacionada con la culpa irracional, pero agrega un marcado sentimiento de angustia. 👉 CULPA SALUDABLE : implica la capac

Desde hace varios años estamos protagonizando cambios sustanciales en los paradigmas educativos. Si bien, mucho tiempo antes aparecieron numerosas corrientes que pugnaban por estos cambios - como la propuesta por María Montessori, en el siglo pasado -, los avances en la tecnología y la ciencia contribuyeron a corroborar y difundir sus ideas en forma masiva. Ya no se trata de que sólo un grupo selecto las conozca y desarrolle, sino que cualquier persona interesada tiene acceso a ellas. En palabras de Eric Kandel, Premio Nobel de Fisiología y Medicina en el año 2000 -: "hoy la ciencia ya no es un tema exclusivo de los científicos, sino que se ha convertido en una parte integral de la vida moderna y la cultura contemporánea, dada su implicación en nuestro bienestar individual y social". Precisamente, allí donde convergen las Neurociencias - cuyo objeto es conocer cómo funciona el cerebro humano -, con otras disciplinas como la Psicología, la Medicina, la Biología, la Pedagogía,